miércoles, 22 de abril de 2009
Y el sonido corre de un oído al otro. Baila. Vuela.
Ayer sonaba la alarma del despertador.
Y al mismo tiempo que sonaba una batería... algo en mi pecho latía al ritmo.
Otras veces no hay piel suficiente para que se erice.
Alguien me oía decirlo:
"Es amor..."
Llámalo amor.
Llámalo música.
Llámalo... una T y una K, si me apuras.
Y sí.
Me enerva oír California, y no Las Vegas.
Me enerva oír uno, y no cuatro.
Me enerva oír mormón, y no persona.
Me encanta sentir huesos.
Y que se me salten las lágrimas por razones desconocidas.
Y saber que hay un señor optimista esperando que le apunte en mi lista.
Y reírme y llorar por todas las cosas que he hecho.
Siento lo que soy, y siento lo que son.
Y seguro que tú también.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
ohhhhhhhhhhhh!!! qué potito!!! ^^ me ha encantado nena!!! Seguiré de cerca tu blog, que tiene muy buena pinta! besotes killeros!! :*****!!!
ResponderEliminar